Coca, perico, pasta, blanca nieves, polvo blanco, nieve, farlopa... Se le puede llamar de tantas maneras... pero para mí sólo tiene un nombre: MIERDA.
No entiendo cómo la gente de mi edad no tiene un poquito de cabeza. Es la droga que más dependencia psíquica crea, es una de las más intensas.
Crea euforia, locuacidad, hiperactividad (y esto es lo de menos) quien la consume tiene riesgo de padecer un infarto, hemorragias cerebrales... y luego ¿quién sufre las consecuencias? la gente que los quiere.
Me supera cómo cada fin de semana la gente se "pone hasta el culo" de esta MIERDA, ver cómo chavales de 16 años en adelante se desviven por un cartoncito o un poco de cristal, me da vergüenza mirarles y verles tan pasaos de todo...
¿Y cómo ayudas a esa gente que está a tu alrededor, de tu misma edad, a los que quieres y conoces de toda la vida y te miran ofreciéndote aunque saben de sobra que no quieres ni olerla?
Está claro que el que no quiere salir de este asqueroso mundo es porque no quiere, por más ayuda que les ofrezca una.
Estoy muy enfadada porque parece que esa MIERDA sea más importante que tú y ante eso no vale nada. Después vienen los arrepentimientos: "que mala me puse, no lo voy a hacer más", "¿se me iba la boca? eres la única que me lo puede decir porque tú no consumes y ves la realidad", "te prometo que no lo voy a hacer más"....bla, bla, bla, ¿de qué me sirve? continúo viendo cómo se encierran en el baño, se meten en el coche y no les hace falta más que un D.N.I. y una carátula de cd's. ¿Y lo que más me fastidia?... que toda la gente que conozco, que cosume, vuelvo a repetir, esta MIERDA, es buena gente, los quiero y no hay otra cosa que me duela más que tener que aguantar esto.
